lunes, 25 de octubre de 2010

LA DESPEDIDA



La verdad es que después del pedazo de año, los dos le teníamos miedo a la despedida. Separarse en México después de haber dado la vuelta al mundo juntos en casi un año, no era la situación más fácil, pero sí la que más se ajustaba a lo que teníamos planeado desde siempre (que yo me quedara en una zona barata y de buenas olas a rematar el viaje). Pero el miedo precisamente nos hizo hacer las cosas bien. Sabíamos que si caíamos en los sentimentalismos, se nos amargaba la última semana de viaje. Los dos pusimos mucho de nuestra parte y solo hubo un par de días que los nervios estuvieron a flor de piel; había muchas cosas en las que pensar y una enorme página de nuestra vida estaba a punto de pasarse, pero en general lo hicimos estupendamente.

La forma en que orientamos la despedida fue llenarla de sorpresas. Pequeñas motivaciones que nos hicieran ir pasando las horas que nos quedaban con ilusión, en vez de cómo una triste cuenta atrás. Fuimos saltando de sorpresa en sorpresa hasta el mismísimo aeropuerto y para cuando pudimos poner la primera cara triste, resulta que estábamos en el control de pasaportes. Resulta gracioso comparar la foto de la salida de Málaga que se supone que teníamos que estar ilusionadísimos (en realidad en ese momento estábamos agotados y tristes por la despedida de la familia) y la de la despedida en Cancún en la que estábamos de “buen rollismo” en vez de tristes por separarnos.

3 comentarios:

IPS dijo...

Querido Mone.
No sabes lo bien que lo he pasado y lo que he aprendido leyendo vuestro blog con avidez. No me he perdido un capítulo pero no he echo comentarios porque hasta ahora no he descubierto como cogno se hacía.
En fin, que me alegro de que hayáis disfrutado de tan magnífico viaje / aventura. Os envidiaría si no fuese pecado, porque si no...... .
Un fortísimo abrazo de tu amigo y exvecino
IPS.
Ps. Ya estás llamando cuando vuelvas a la patria, máxime si pasas por Madrid.
Besos a tu santa y abnegada esposa.

Pil-pil dijo...

No sabeis la pena que me da que se acabe este viaje, me lo he pasado fenomenal siguiendo vuestro diario, imagino que vosotros lo habreis pasado mejor, pero me ha encantado que lo compartais con todos nosotros.
Hispana, tus crónicas buenisimas y me troncho con el "morro " de Ignacio...
Un abrazo fuerte a los dos
Gabriel A.

HISPANA dijo...

- Bueno pues tengo que decir que todo el mérito de mantener la alegría hasta el final y de superponer una sorpresita con otra es de Ignacio. Fue casi imposible ponerse triste la última noche cuando de repente en vez de en un "backpacker" me encontré en un hotel de 5 estrellas en la misma playa y cuando me encontraba chocolatinas en el bolso y un largo etc. de sorpresillas ¡¡gracias por hacer mi viaje de vuelta a España menos traumático!!